Las cuatro estaciones de Vivaldi en la Iglesia Anglicana de Todos los Santos de Roma

Disfruta de la música clásica como nunca antes en esta asombrosa interpretación de la obra maestra de Vivaldi en la extraordinaria Iglesia Anglicana de Todos los Santos de Roma.

Las cuatro estaciones de A.Vivaldi Las cuatro estaciones es la más conocida de las composiciones de Antonio Vivaldi

. En realidad, son cuatro conciertos separados, escritos a partir de otros tantos sonetos de un autor desconocido y cada uno inspirado en una estación del año. Forman parte de «Il cimento dell'armonia e dell'invenzione» del Opus 8.

PRIMAVERA
La música describe paso a paso los acontecimientos individuales de la primavera: el canto de los pájaros, la tormenta eléctrica y, en el baile final, el violín solo representa a un pastor dormido, las violas representan el ladrido del perro fiel y otros violines tocan el susurro de las hojas.

VERANO
Este es sin duda el concierto con la eficacia más descriptiva. La tormenta estival es su protagonista y se la oye acercarse con el calor del verano y, al final, estallar con toda su violencia. El solo describe al pastor asustado por la repentina tormenta.

OTOÑO
Aquí el protagonista es Baco. Vivaldi reproduce sin parangón los síntomas de la intoxicación provocada por el vino, mientras que en el movimiento intermedio, titulado «Durmientes borrachos», disfruta del ambiente tranquilo y de ensueño que se respira después de la fiesta. Por último, el tercer movimiento describe los ritmos excitantes de la caza.

INVIERNO
Este concierto, con sus tonos pastorales, fue concebido por Vivaldi para ser interpretado en la iglesia. De hecho, toda la orquesta siempre toca casi «en silencio», para no molestar a los fieles reunidos en oración.